¡ Qué buena Karoo ! ¡ Así, a lo loco, de primera frase del post !
Mira que llevaba tiempo tentada a comprar esta novela por las buenas críticas que he leído sobre ella, pero, debo reconocerlo, cada vez que veía la portada (que es una ilustración de Miguel Brieva) me tiraba para atrás. Al final me decidí cuando me encontré con la edición de bolsillo.
Con Karoo me he reído mucho (sobre todo en la primera mitad), cosa que hacía mucho que no me pasaba con un libro, quizás desde que leí (hace casi mil años) La conjura de los necios, novela con la que ha sido muy comparada (algo inevitable) por las muchas similitudes que hay entre las dos. Karoo es también una historia graciosa y deprimente a la vez, con un protagonista desastroso. Además las dos son novelas póstumas, sus autores murieron antes de verlas publicadas y ambas se han considerado novelas de culto.
Steve Tesich (1942-1996), novelista y guionista americano de origen serbio (ganó un óscar al mejor guión original por la película El relevo) murió dos años antes de que se publicara Karoo (1998), su segunda novela. En su momento fue muy elogiada en Estados Unidos pero no tuvo mucho éxito hasta que una editorial francesa la rescató en 2012, llegándose a convertir en un súperventas. En España la editó Seix Barral en 2013.
Ed. francesa (me gusta más esta portada...)
Saul Karoo es el protagonista de este libro. Un millonario cincuentón, reescritor de guiones de cine y un alcohólico que no se emborracha beba lo que beba (cosa que le entristece muchísimo). Es un desastre de persona, rodeado de mentiras que hacen que cada vez la fastidie más sin necesidad. Cuanto más lees, más ganas te dan de gritar: ¿¡¡ Por quéeee, por qué haces esooooo !!?? Con un único amigo, un hijo que se desespera por tener su atención, un jefe maquiavélico, una exmujer y un nuevo amor que aparece de repente y que hará que la historia dé un giro... Al final se le acaba cogiendo cariño, sobre todo en la segunda mitad de la novela, donde afloran sus sentimientos... A su manera, pero afloran.
En fin, que me lo pasé estupendamente leyéndola.
En fin, que me lo pasé estupendamente leyéndola.
Como decía al principio, Steve Tesich ganó un óscar al mejor guión original por la película El relevo (1979), dirigida por Peter Yates. No la conocía y la verdad es que me gustó bastante. Aunque me parece exagerado que estuviera nominada a mejor película entre estas otras y que le ganara el óscar al mejor guión a Manhattan de Woody Allen.
La película cuenta la historia de cuatro amigos de un pequeño pueblo, que acaban de terminar el instituto y que están en la típica época de no saber qué hacer con su vida. Llega la hora de ser responsables y tomar decisiones o eso es lo que quieren sus padres... Para mí, el mejor es el protagonista (Dennis Christopher), un obseso del ciclismo y de Italia que vuelve loco a su padre hablándole todo el día en italiano y escuchando ópera (en italiano, por supuesto). Es una película simpática para pasar una tarde de domingo.
Termino con un tema de Caruso que sale en la BSO (y que le encanta al protagonista).